La norma “planteaba” una mayor protección para familias numerosas, monoparentales y
las que tienen a su cargo a personas mayores, con discapacidad o dependientes.
Aunque en nuestra opinión, esta ley tiene gravÃsimas deficiencias de fondo por no combatir
las causas de los problemas que hoy tiene la familia en el mundo, dedicándose a poner parches que no solucionan el problema, coincidimos en la necesidad de crear leyes donde la familia sea la protagonista y se combatan las causas de sus problemas.
El rechazo de dicha ley no ha sido lo peor, sino los comentarios de algunos concejales
que no tenÃan desperdicio, como el de Isabel Aramburu (Geroa Bai), que se atrevió a decir que:
“hablar de la familia es hablar poco menos de una entelequia, la familia hoy no existe, sentenció, parece que ustedes la añoran, dijo refiriéndose a los que defendÃan esta ley, y quieren que se escriba con “f mayúscula”.
Sra. Aramburu, es preciso recordarle que hoy
la familia es célula básica del edificio social, que la familia ha sido y es
fuente y escuela de solidaridad, ¿qué hace posible hoy el sostenimiento de más
de 5 millones de parados en España?, ¿qué hace posible la asistencia de miles y
miles de enfermos en todo el territorio nacional?, sin la familia estarÃamos en
una situación de absoluta tragedia y desesperanza. El sistema sabe que la
familia es un reducto de amor gratuito y desinteresado, y también sabe de la potencia
polÃtica que tiene la familia responsable. El actual sistema capitalista
salvaje es absolutamente insolidario, y por ello ataca las bases sobre las que
se asienta la familia como fuente de solidaridad.
Sra. Aramburu, Sres. Del cuatripartito, algo que
no deben olvidar todos los partidos que se dicen de izquierdas (digo dicen
porque en realidad son “falsa izquierda”), es que para el Movimiento Obrero la
familia era la piedra angular de todo el
edificio social, fuente de la fraternidad y motivo de su lucha y de su causa.
Hoy los partidos polÃticos habéis abandonado la defensa de los más débiles y la
defensa de la institución más básica para garantizar la solidaridad en el
mundo.
¡La ignorancia de nuestra clase polÃtica es
escandalosa!!!!!