En relación a las fiestas de San Fermín, Maya ha
condenado, en primer lugar, la agresión sexual cometida en la madrugada del día
9 al 10 en un bar del Casco Antiguo y ha lamentado el fallecimiento sucedido en
el río Arga el día 6 en lo que ha definido como “los hechos más tristes de
estas fiestas”, al tiempo que ha trasladado todo su “cariño y apoyo a ambas
familias”.
Al margen de estos hechos, Maya se ha mostrado
satisfecho por el transcurrir de las fiestas y ha afirmado que “la imposición
que el alcalde de Bildu Joseba Asiron hizo de la ikurriña no ha empañado unos
buenos Sanfermines”.
“Los pamploneses han dado una lección al
cuatripartito estando muy por encima de la politización de las fiestas
pretendida por Bildu”, ha señalado el portavoz de UPN, para quien, “frente a
esta voluntad de tensionar y politizar las fiestas por parte de Bildu, el
rechazo de la ciudad quedó claro de nuevo ayer durante la celebración del Pobre
de Mí, cuando Asiron recibió una sonora pitada al comenzar su discurso en
euskera”.
Los regionalistas se han mostrado “a favor, como
no podía ser de otra manera,” de la presencia del euskera en los actos
oficiales, aunque siempre tras la intervención en castellano, respetando a la
mayoría de los pamploneses que no conocen dicho idioma.
En este sentido, el portavoz de UPN ha recordado
que “la imposición de la bandera de Euskadi se hizo de forma unilateral y
cobarde, sin consultarla y ni siquiera anunciarla a los grupos y convirtiendo a
un funcionario en portada de medios de comunicación de toda España al mandarlo
a izar la bandera minutos antes del chupinazo, mientras el alcalde afirmaba el
día anterior no tener ni idea del soporte instalado en la fachada y derivando
las cuestiones a los servicios de mantenimiento”.
Maya ha vuelto a rechazar el “regate legal
utilizado por Bildu para imponer la ikurriña a toda una ciudad”, al utilizar la
presencia de parlamentarios de Bildu del País Vasco. “No debían de ser tan
importantes los invitados para honrarles con la colocación de la bandera de su
comunidad, cuando no fueron presentados al resto de concejales ni recibidos por
la Corporación”, ha afirmado.
“Lo que Asirón hizo el día 6 fue simplemente una
estafa”, ha subrayado.
Por otra parte, los regionalistas han criticado
que “durante todas las fiestas han permanecido en las calles, especialmente del
Casco Antiguo, numerosas pancartas y carteles de partidos y entidades amigas de
Bildu con las consignas habituales pro presos y a favor de la disolución de
Navarra en la CAV sin que el Ayuntamiento las haya retirado”.
Acoso en la procesión y un alcalde contra
las tradiciones
Maya ha lamentado, asimismo, que una vez más los
regionalistas y miembros del Cabildo fueran “diana de insultos, gritos y
escupitajos” en la calle Curia durante la procesión. El regionalista, además,
ha denunciado que Asirón “se dedicara a saludar y dar abrazos” a quienes
segundos antes habían acosado a los corporativos de UPN, sin tener un mínimo
gesto de solidaridad o apoyo hacia los concejales regionalistas. “Asirón ni
siquiera ha querido rechazar estos actos y ha dado la espalda a la realidad”,
ha afirmado el portavoz de UPN.
A este respecto, Maya ha criticado que el actual
alcalde no asistiera a la misa en honor a San Fermín, pero sí participara en la
Procesión, en lo que ha calificado como “un acto de incoherencia absoluta, al
pretender que una procesión, junto al arzobispo, al Cabildo Catedralicio y tras
la figura de San Fermín no es un acto también religioso”.
El regionalista ha recordado a Asirón que “el
alcalde acude a los actos como representante de todos los pamploneses, no de
una minoría” y que “debe guardar las tradiciones que dieron origen a nuestras
fiestas”.