jueves, 16 de julio de 2015

Primeros puntos negros en la alcaldía de Bildu. Por Enrique Maya



En relación a las fiestas de San Fermín, Maya ha condenado, en primer lugar, la agresión sexual cometida en la madrugada del día 9 al 10 en un bar del Casco Antiguo y ha lamentado el fallecimiento sucedido en el río Arga el día 6 en lo que ha definido como “los hechos más tristes de estas fiestas”, al tiempo que ha trasladado todo su “cariño y apoyo a ambas familias”.
Al margen de estos hechos, Maya se ha mostrado satisfecho por el transcurrir de las fiestas y ha afirmado que “la imposición que el alcalde de Bildu Joseba Asiron hizo de la ikurriña no ha empañado unos buenos Sanfermines”.

“Los pamploneses han dado una lección al cuatripartito estando muy por encima de la politización de las fiestas pretendida por Bildu”, ha señalado el portavoz de UPN, para quien, “frente a esta voluntad de tensionar y politizar las fiestas por parte de Bildu, el rechazo de la ciudad quedó claro de nuevo ayer durante la celebración del Pobre de Mí, cuando Asiron recibió una sonora pitada al comenzar su discurso en euskera”.
Los regionalistas se han mostrado “a favor, como no podía ser de otra manera,” de la presencia del euskera en los actos oficiales, aunque siempre tras la intervención en castellano, respetando a la mayoría de los pamploneses que no conocen dicho idioma.
En este sentido, el portavoz de UPN ha recordado que “la imposición de la bandera de Euskadi se hizo de forma unilateral y cobarde, sin consultarla y ni siquiera anunciarla a los grupos y convirtiendo a un funcionario en portada de medios de comunicación de toda España al mandarlo a izar la bandera minutos antes del chupinazo, mientras el alcalde afirmaba el día anterior no tener ni idea del soporte instalado en la fachada y derivando las cuestiones a los servicios de mantenimiento”.

Maya ha vuelto a rechazar el “regate legal utilizado por Bildu para imponer la ikurriña a toda una ciudad”, al utilizar la presencia de parlamentarios de Bildu del País Vasco. “No debían de ser tan importantes los invitados para honrarles con la colocación de la bandera de su comunidad, cuando no fueron presentados al resto de concejales ni recibidos por la Corporación”, ha afirmado.
“Lo que Asirón hizo el día 6 fue simplemente una estafa”, ha subrayado.
Por otra parte, los regionalistas han criticado que “durante todas las fiestas han permanecido en las calles, especialmente del Casco Antiguo, numerosas pancartas y carteles de partidos y entidades amigas de Bildu con las consignas habituales pro presos y a favor de la disolución de Navarra en la CAV sin que el Ayuntamiento las haya retirado”.
Acoso en la procesión y un alcalde contra las tradiciones
Maya ha lamentado, asimismo, que una vez más los regionalistas y miembros del Cabildo fueran “diana de insultos, gritos y escupitajos” en la calle Curia durante la procesión. El regionalista, además, ha denunciado que Asirón “se dedicara a saludar y dar abrazos” a quienes segundos antes habían acosado a los corporativos de UPN, sin tener un mínimo gesto de solidaridad o apoyo hacia los concejales regionalistas. “Asirón ni siquiera ha querido rechazar estos actos y ha dado la espalda a la realidad”, ha afirmado el portavoz de UPN.
A este respecto, Maya ha criticado que el actual alcalde no asistiera a la misa en honor a San Fermín, pero sí participara en la Procesión, en lo que ha calificado como “un acto de incoherencia absoluta, al pretender que una procesión, junto al arzobispo, al Cabildo Catedralicio y tras la figura de San Fermín no es un acto también religioso”.
El regionalista ha recordado a Asirón que “el alcalde acude a los actos como representante de todos los pamploneses, no de una minoría” y que “debe guardar las tradiciones que dieron origen a nuestras fiestas”.